27 de diciembre de 2020
La llegada de un nuevo miembro a nuestra familia es siempre motivo de alegría, pero también de incertidumbre. Conviene normalizar la situación lo antes posible, para evitar estrés tanto en el cachorro como en nosotros. Los primeros días son un proceso de adaptación para la mascota. Hay que tener en cuenta que para ellos es una situación nueva, habiendo abandonado recientemente la seguridad de la madre, debiendo poco a poco entrar en la dinámica familiar, pero muy importante por nuestra parte es no descuidarnos en su cuidado, debiendo observar durante 4 o 5 días cualquier pequeño síntoma (diarrea, mocos, toses, picores, falta de apetito...), que nos haga sospechar que algo no va bien. La alimentación debe ser adaptada a la edad y a la especie, importante invertir en un pienso de calidad y abstenernos de darle comida casera o chucherías no aptas para ellos, por lo menos en esta primera etapa. No debe salir de casa por ahora y tampoco conviene bañarlos sino es estrictamente necesario, para evitar enfriamientos. Después de estos primeros días es conveniente realizarles una revisión veterinaria para comprobar que su estado de salud sea bueno y desparasitarlo, o si se le hubiera detectado alguna alteración poder poner tratamiento, todo si es en la seguridad de su domicilio mejor, para evitar que salga a la calle sin vacunación. Cuando ya esté desparasitado y todo en orden, se iniciará el proceso de vacunación que debe estar completo antes de salir a la calle, para lo cuál también debería estar identificado con su microchip. Actualmente existe una promoción que por solo 15€, cuentas con la primera consulta, desparasitación y, lo más importante, el asesoramiento por mi parte si fuera necesario para cualquier cuestión o duda que os pudiera surgir.